09 febrero 2006

Vaselina

No me gusta el fútbol. Prefiero pasar una noche de Copa con mis amigos en una taberna de aspecto modernillo, bebiendo jarras de cerveza y cenando sentados en corro, gritando como energúmenos cada vez que un balón se le cuela al estupefacto Casillas, cada vez que Milito se convierte en héroe regional durante un minuto, cada vez que Ewerthon se lanza por la banda como una flecha, cada vez que Cani coloca el balón, cada vez que el Real Zaragoza encorre al Real Madrid como si fueran cerdos. Y sobre todo levantarme al día siguiente con resaca y con la garganta destrozada de haber gritado como un loco ni una ni dos ni tres veces, sino media docenica de ocasiones. Y es que donde esté una cena con colegas, que se quite el fútbol.

Extremoduro - Golfa

1 comentario:

Anónimo dijo...

De copas para la Copa!!
ehh muy bueno lo de supervillano jajaja, me encanta maño!