07 noviembre 2007

Ayer, ayer

No es cuestión de montar tragedias pero, mal que me pese, he de reconocer que hay momentos en la vida en que una mano amiga...

...una boca amiga...

...un oído amigo...

...unos brazos amigos...

...una sonrisa amiga...

...son tan importantes como el aire.


(...y ahora mismo, aunque no me asifixie, me cuesta respirar)


The Raveonettes - That great love sound