Imagina que el aire respirable fuera verde.
Cada uno de nosotros llevaría a su alrededor una nube de claridad que aparecería cada vez que exhaláramos y desaparecería cada vez que inspiráramos. Cada uno de nosotros sería capaz de ver el mundo durante breves segundos y existirían disciplinas encaminadas a expulsar la mayor cantidad de dióxido de carbono posible. Aún así, la manera más simple de ver el mundo con claridad sería acercarse lo máximo posible a otra gente, para que así nuestras nubes juntas ocuparan el mayor espacio posible.
Ojalá el aire respirable fuera verde.
Arovane - Eleventh!
14 febrero 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
puestos a pedir, me encantaría que el aire respirable supiera a batido de chocolate
pero con tu propuesta me conformo
saludos marcianos
n a c o
elgiganteverde
Publicar un comentario