15 septiembre 2008

Campeon de la tortilla

Atención, poned atención, toda ella, sin distraeros con los hadrones ni con los asesinatos de género. Poned atención al éxito de Paco.

El éxito diario de la tortilla de huevo, simple, sencilla, gabacha, pero con el toque secreto (al menos hasta hoy) del queso parmesano y de las hierbas provenzales en su justa medida. Parma y la Provenza, ahí es nada, viajar sin salir de la mesa de camping que tiene en la cocina. Francia e Italia aunadas en unas Naciones Unidas del paladar fino y del gusto educado.

No desvieis la atención. Meros segundos transforman a la tortilla de Paco. Si en maravilla de la mesa o en desastre y vergüenza para el joven chef de Champion y Hacendado... eso sólo la fortuna y la destreza del artista lo decidirán, y un Dios si es que hay uno en el cielo y si tiene tiempo libre para espiar fogones. Y la coordinación oculo-manual, atención, que no es tarea fácil decidir el ángulo correcto en el que doblar la tortilla en dos ni la manera en que la rasera recogera el dorado manjar y lo depositará sobre el plato de loza comprado en el supermercado chino. En cuanto al emplatado: patatas fritas congeladas (por eso de la guarnición clásica), hojita de perejil (por ese borrachín de la tele) y chorrito de salsa de soja a un lado (por eso de la desestructuración y la nouvelle cuisine).

A Paco le dijeron una vez que los cocineros ligaban mucho. En ello está.

Sunny Day Real Estate - Friday

2 comentarios:

o s a k a dijo...

mientras no se queme con los fogones...

n a c o
hacendadoForever

Anónimo dijo...

XD

Pues es cierto. Por lo menos en mi caso. Un buen cocinero sabe que el secreto de un buen plato está en elegir bien los ingredientes, prepararlos con cariño y tiempo. Además suelen ser personas que disfrutan tanto cocinando como comiendo con un buen vino. Esa sensualidad junto con todos los ingredientes que he mencionado antes (cuidado, dedicación y cariño) son una receta inmejorable en otros ámbitos.

De hecho, si no engordaran, serían los hombres perfectos.